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Aprender 2018: siguen las
mejoras en lengua (matemática, una materia pendiente)
De la evaluación del Ministerio de Educación participaron 574.000 alumnos de 6to grado de 19.600 escuelas de todo el país, un 6% más que en 2016.
Por Marina Giacometti
Los resultados
de la Evaluación Aprender 2018
que fueron anticipados este jueves por el presidente Mauricio Macri
y luego detallados por el ministro de Educación Alejandro Finocchiaro
registraron una mejora en lengua en todas las provincias
respecto a la medición de 2016, mientras que los niveles de
matemática siguen estando por debajo de lo esperable.
De esta edición,
participaron 574.000 alumnos de 6to grado de 19.600 escuelas de todo el país,
tanto estatales como privadas.
Un 75% de los
estudiantes evaluados alcanzó los niveles satisfactorio y avanzado en lengua, un
8,5% más que en 2016, cuando solo habían superado la media el
66,8% de los alumnos. En tanto, un 25% sigue ubicándose por debajo del nivel
básico, aunque ese estamento se redujo un 7,4% respecto a 2016. Esto
implica también una reducción de la brecha de desigualdad educativa entre los
alumnos con más altos y más bajos desempeños.
En matemática,
si bien se observaron leves mejoras en 9 provincias, no alcanzó para subir el
promedio nacional, donde aún el 43% de los estudiantes se
ubica en los niveles básicos y por debajo del
básico. En tanto, el 57,4% de los alumnos se ubica en los
niveles satisfactorio y avanzado, mientras que en 2016 lo hacían el 58,6% de
los mismos.
En diálogo con
la prensa, Finocchiaro justificó los bajos niveles en matemática al explicar
que luego de la primera evaluación Aprender en 2016 y al conocer los “graves
problemas existentes en cuanto a comprensión lectora y producción de textos”, se
decidió priorizar como primera política el mejoramiento de lengua.
“Cuando se trabaja esa área inmediatamente también mejoran otros saberes como
las Ciencias Sociales y Naturales e inclusive matemática. Ningún alumno puede
resolver un problema si no entiende el anunciado”, expresó.
El funcionario
reiteró, además, que a partir de este año en un cuarto de las escuelas del país
se lanzará el programa Aprender Matemática -un plan
votado en el Consejo Federal de Educación que contempla una nueva forma
pedagógica de enseñanza de la materia con el objetivo de revertir los niveles
alcanzados por los alumnos. “Esto nos va a dar un patrón, para ser medido en
dos o tres años, a ver si de esta forma estamos mejorando también los
rendimientos en la materia”, planteó el ministro.
Del total de los
estudiantes censados, un 73% asisten a escuelas de gestión
estatal y un 27% a instituciones privadas. Las escuelas
públicas presentan una mayor proporción de estudiantes pertenecientes a niveles
socioeconómicos bajos (23%), mientras que en la educación privada esa cifra se
reduce al 2%. También tienen una mayor proporción de
estudiantes repitentes (14% estatal, 3% privado).
Si se
tiene en cuenta el desempeño de lengua por sector de gestión,
los datos arrojan que en escuelas de gestión estatal y niveles socioeconómicos
bajos el 58,5% alcanza niveles satisfactorio y avanzado, mientras que en
niveles socioeconómicos altos esa cifra se eleva al 84,1%. En tanto, en
colegios privados, ambas cifras se elevan al 70,5 y al 95% respectivamente.
Un dato
que arrojó la evaluación 2018 es que se produjo una disminución de las
brechas existentes entre las escuelas con puntajes más altos y más bajos por
sector de gestión respecto a la medición de 2016. “Todas las
provincias argentinas que mejoraron su desempeño en lengua, no lo hicieron a
costa de los que menos saben. Los que habían tenido desempeños más bajos en
2016 también mejoraron. Eso es lo que permite disminuir la brecha de inequidad
en los saberes, uno de los huesos más difíciles de roer dentro del sistema
educativo”, explicó Elena Duro, secretaria de Evaluación
Educativa.
En cuanto al desempeño
por sexo, también se redujo la brecha existente entre varones y
mujeres en lengua y matemática entre 2016 y 2018. En lengua en 2016 había 7% de
diferencia en los niveles satisfactorio y avanzado entre niñas y niños. En
2018, esta diferencia se redujo al 5%. En matemática, la diferencia en 2016 era
de 3% y en 2018 se redujo a 2%. “El imaginario social piensa que a las nenas
les tiene que ir mejor en lengua y a los chicos en matemática. Estamos
disminuyendo esa brecha. Hemos insistido mucho para que ese estereotipo se
rompa”, sostuvo Duro.
El nivel de
participación en las pruebas de los diferentes establecimientos educativos fue
del 94%, un 6% más que en 2016. Las provincias que registraron
la mayor adhesión fueron Mendoza y La Pampa con el 100% de las escuelas. En
tanto, Neuquén sólo registró un 57% de participación debido a que durante los
días de realización de la evaluación, los docentes se encontraban realizando medidas
de fuerza.
La Educación Sexual Integral, también fue tema de consulta
En 2017, en el
censo realizado a alumnos de secundarios, el 75% había mencionado entre los
temas que la escuela debería abordar a la educación sexual y la violencia de
género.
Tras esa
experiencia, este año por primera vez los contenidos sobre Educación
Sexual Integral formaron parte de las pruebas Aprender. Tanto
los directivos de las escuelas como los docentes y alumnos de 6to grado
respondieron preguntas referidas a la implementación en el aula de esta
política educativa enmarcada en la ley 26.150.
Si bien más
adelante se difundirán los resultados completos de este cuestionario
complementario, los datos preliminares arrojaron que el 98% de los directivos
de escuelas argentinas de todo el país afirmaron abordar contenidos de ESI en
el aula; mientras que el 99% de los docentes admitió contar con distintos
materiales para el abordaje de los contenidos. Además, el 72% de los maestros
declaró haber recibido capacitación sobre ESI.
La
disparidad surge al desglosar qué tipo de contenidos obligatorios recibieron
los alumnos. Mientras que el 100% de los estudiantes manifestó
haber visto en clase algún tipo de contenido como el cuidado del cuerpo y la
salud (86%); la importancia del buen trato en la escuela (79%); los derechos de
niños, niñas y adolescentes (78%) y los cambios del cuerpo en la adolescencia
(76%); solo recibió información sobre embarazos el 50%; prevención del
maltrato, el 55%; información sobre métodos anticonceptivos y ETS, el 43% y
cómo evitar abusos, el 37%.
En las próximas
semanas, además del desglose de datos por jurisdicciones, se difundirán también
informes sobre formación docente, educación rural, educación y género en la
escuela primaria y estudiantes indígenas y migrantes.
Fuente: Diario Ámbito Financiero, 14-mar-2019.