ECONOMÍA
Entre 2019 y 2020 el
país deberá pagar 54 mil millones de dólares
De la fiebre de la deuda a las
cuentas en terapia
El
gobierno de Mauricio Macri elevó los pasivos en dólares con acreedores privados
de 62 mil millones a 104 mil millones. Una carga cada vez más difícil de
afrontar.
Por Cristian Carrillo
La
fuga de capitales agrava el cuadro de la disponibilidad de divisas para pagar
deuda.
En tres años de
gestión de Cambiemos el monto de la deuda total medida en dólares se incrementó
72,7 por ciento, lo que deja al país en una situación de extrema vulnerabilidad
para encarar los próximos vencimientos de capital e intereses. Este dato se
complementa con la apreciación local de la divisa estadounidense, que desde
entonces fue del 326,4 por ciento. En el lapso de este año y el próximo el país
debe cancelar compromisos por un total de 54.318 millones de dólares, una cifra
cercana a los casi 57.000 millones del crédito del Fondo Monetario
Internacional, de los cuales unos 50.000 millones serán utilizados por el
actual gobierno. Si se toma solo la deuda con privados, el stock pasó de 62.507
millones de dólares -incluyendo la que estaba en manos de los fondos buitre- a
104.088 millones en diciembre último, evidenciando un aumento del 66,5 por
ciento. De continuar con esta política y luego de que se acaben los dólares del
FMI, al gobierno solo le quedará la opción de utilizar reservas del Banco
Central, lo que pone en riesgo también el respaldo de depósitos en moneda
extranjera.
La primera etapa
del endeudamiento fue con los mercados internacionales y la segunda, luego de
que los inversores le cerraron la puerta al gobierno por la insustentabilidad
de su modelo, se generó con el FMI. "De esta forma, el stock de deuda en
moneda extranjera sobre las exportaciones (indicador de sustentabilidad de la
misma) alcanzó el 226,8 por ciento", según un informe de la consultora
Proyecto Económico. El desembolso del organismo, que asciende a casi 57.000
millones de dólares, se concentró en la mitad del año pasado y principios de
este, mientras que el vencimiento de repago es sumamente corto. En los años con
vencimientos más abultados, como 2022, cuando el total asciende a 37.665
millones de dólares, el componente de intereses supera en 50 por ciento el
ingreso genuino de dólares por exportaciones.
Para este año no
se esperan nuevas emisiones de deuda en los mercados internacionales y en un
análisis conservador las letes se renovarán en un 50 por ciento. Es así que los
vencimientos alcanzarían, medido en divisas, a 28.108 millones, de los cuales
el FMI desembolsará 21.500 millones, el 76,5 por ciento del total, según el
informe elaborado por Genaro Grasso, Estanislao Malic, Horacio Rovelli,
Federico Vaccarezza y Martín Carro, bajo la dirección de la economista y
diputada Fernanda Vallejos. De acuerdo a sus cálculos, las dificultades, en
términos de sostenibilidad de la deuda, se tornan acuciantes el año próximo. Si
Argentina continúa con los mercados financieros cerrados, deberá afrontar los
servicios en moneda extranjera con su disponibilidad de reservas
internacionales.
"Es vital destacar
en nuestro análisis que en Argentina el sistema bancario es bimonetario, por lo
que el Banco Central debe contar con reservas internacionales para respaldar
los depósitos en moneda extranjera, de lo contrario una corrida bancaria podría
generar una crisis sistémica", señala el informe. En el caso de que se
mantenga el actual modelo de fuga de capitales, apertura comercial y escasa
intervención cambiaria que convalida el organismo que conduce Christine
Lagarde, "la economía se dirige a una crisis sistémica, dado que no será
posible respaldar los depósitos en dólares de los ahorristas". "El
organismo es, así, corresponsable de la crisis a la que el gobierno conduce a
la Argentina", agrega el documento de Proyecto Económico.
Las reservas a
fin de este año se estiman en 52.275 millones de dólares, mientras que el stock
de depósitos en dólares ascendería -si se mantiene estable- a 30.013 millones,
lo que deja 22.262 millones de reservas disponibles, según el relevamiento
sobre la base datos de la Secretaría de Finanzas y el BCRA. Sin embargo, el año
próximo las reservas, de continuar con este esquema y utilizando parte del
stock para pagar deuda -teniendo los canales de mercado y el FMI cerrados-, se
reducirán a 26.065 millones de dólares. Si el stock de depósitos en moneda
extranjera se mantiene en los mismos niveles que en la actualidad, las reservas
disponibles serán negativas en 3948 millones. Es decir, no se podrá cubrir el
retiro masivo de depósitos. Siguiendo el mismo esquema cambiario y monetario vigente,
las reservas disponibles en 2021 serán negativas en 21.709 millones de dólares,
casi sin respaldo alguno de los depósitos.
Fuente: Diario Página 12, 19 de marzo de 2019.