EL
PAÍS
El Gobierno sacó un nuevo decreto en el primer día de
aislamiento obligatorio
Nuevas excepciones y algunos
límites a la cuarentena
En
el Gobierno se mostraban conformes sobre el acatamiento aunque esperaban que en
los próximos días se haga más fuerte. Prometen endurecer los controles.
Por Fernando Cibeira
Alberto
Fernández junto a Agustín Rossi y efectivos de las Fuerzas Armadas que actúan
en los operativos de emergencia.
El Gobierno se mostraba conforme en su evaluación del primer
día de cuarentena obligatoria decretada a partir de las 0 hora, con distintos
grados de acatamiento de acuerdo a la hora del día y los lugares del país que
se tratara. La convicción en la noche del viernes era que se sentirá mucho más
en los próximos cuatro días entre el fin de semana y los feriados. "Va a
ser progresivo, la gente va a ir tomando conciencia", aseguraban. Como
notaron cierta relajación en algunos rubros -como en el gastronómico- anoche
salió un nuevo decreto especificando nuevas excepciones para algunas industrias
estratégicas que no pueden cortar su línea de producción y aclarando que
restaurantes y locales de comidas rápidas pueden hacer delivery pero no atender
al público.
En el punteo, el
párate en algunos rubros el párate había sido casi total mientras que en otros
el balance era más ambiguo. Esperaban generar conciencia a partir de las
imágenes de algunas personas que fueron detenidas por violar el aislamiento
social obligatorio. Por ejemplo, contaban el caso de un hombre que había pasado
haciendo running por la esquina del Ministerio de Justicia. La policía lo demoró.
"Esto no es un estado de sitio. El Presidente no quiere llegar a ese
punto. Pero hay gente que uno ve en el auto como si estuviera de paseo. Vamos a
endurecer los controles y en los próximos días va a ser más notorio",
explicaban en Gobierno.
El decreto
firmado el viernes añadió rubros de actividades y servicios para los que
detener la producción sería muy perjudicial, que se sumaron a los exceptuados
de la cuarentena. Aclaró que otras industrias que se encuentren en la misma
condición pueden acercar su solicitud para trabajar con una dotación mínima a
la Secretaría de Industria:
* la producción
y distribución de biocombustibles y de combustibles nucleares.
* una dotación
mínima para el funcionamiento de la Fábrica Argentina de Aviones.
* actividades vinculadas
a la protección ambiental minera.
* las
curtiembres para recibir la producción de cuero proveniente de los
frigoríficos.
* la Comisión
Nacional de Valores podrá autorizar una dotación mínima en caso de resultar
necesario.
* los hoteles
afectados a la emergencia sanitaria.
* la dotación
necesaria para la operación de aeropuertos. Lo mismo para los estacionamientos.
* Por último, se
refiere a "los restaurantes, locales de comidas preparadas y locales de
comidas rápidas", que podrán repartir comidas a domicilio pero de ninguna
manera pueden abrir sus puertas al público, como habían detectado en algunos
casos.
Alberto habló con Kristalina
Pero el otro
tema que ocupó buena parte del día del Presidente fue el económico. Junto al
ministro de Economía, Martín Guzmán, conversó con la titular del FMI,
Kristalina Georgieva, con quien coincidieron en la imposibilidad del país de
afrontar pagos en moneda extranjera en los próximos años. En el entorno del
Presidente insistían en la convicción de que el desastre financiero que
envuelve al mundo junto con el avance de la pandemia puede resultar beneficioso
para la estrategia de reestructuración de la deuda. La idea que persiste es que
a los bonistas les conviene agarrar lo que les ofrezca Guzmán, por escaso que
sea, a la nada que podría sobrevenir con un default arrastrado en el tsunami
financiero internacional.
De las
cuestiones operativas de la cuarentena se ocuparon el jefe de Gabinete,
Santiago Cafiero, el ministro del Interior, Wado de Pedro, y la ministra de
Seguridad, Sabina Frederic. Ellos recorrieron en helicóptero los retenes que
las fuerzas de seguridad nacionales y porteñas ubicaron en los accesos de la
Ciudad. Cafiero y Wado se encontraron con Ginés González García en "la
sala de situación" instalada para un seguimiento en tiempo real de la
evolución de la pandemia. Al final del día, resultó que se habían detectado 30
nuevos casos para llegar a un total de 158 infectados. Por ahora, aseguraban,
era un desarrollo normal de la enfermedad. Esperan un salto de casos para los
próximos días, cuando se empiecen a hacer test en las provincias y la
progresión avance.
"No se escucha
ni una crítica al Gobierno, menos al Presidente", evaluaba un funcionario
la puesta en marcha del operativo. Por un lado lo veía lógico, porque la
propuesta que acercaron tanto los legisladores de la oposición como los
gobernadores era ir todavía más allá, con la posibilidad de declarar un estado
de excepción. Le adjudicaban ese consenso a la estrategia de Fernández de
sentarse con todos antes de hacer los anuncios. Igual, se atajaban. "Esto
recién empieza y nos van a juzgar por los resultados", advertían.
Fuente:
Diario Página 12, El País, 21 de marzo de 2020.