HISTORIA
EHPAD
Hace cerca de 114 años, cerca de París, una gran dama de 70 años, nieta del fundador de un país muy lejano creó una institución para dar asilo y atención médica gratuita a ancianos sin recursos.
Más de 100 años después, en esta época de pandemia, esta institución aun existe y es una de las tantas EHPAD (residencia medicalizada) de Francia, que constituye la primera trinchera del estado francés contra el coronavirus.
La gran dama era nada menos que Josefa Balcarce, nieta del General San Martín. Era la única heredera de una finca en Brunoy, al este de Paris, que le había legado su padre, Mariano Balcarce.
Josefa, ya viuda, decidió convertirla en una residencia para pobres y ancianos, gratuita, muy avanzada para su tiempo, dedicando casi 18 años a administrarla.Para eso creó la Fundación Balcarce Gutiérrez de Estrada (el último era el apellido de su marido, que ya había fallecido). Todavía existe con el mismo fin y en la misma dirección, el 28 de la Rue de Bellevue, con un aspecto muy parecido al que tenía en 1906. Tiene capacidad para unos 50 residentes permanentes y es gestionada por la Sociedad Filantrópica de París, a quien cedió su administración por legado testamentario.
Durante la I GM, Josefa transformó la residencia en el Hospital Auxiliar Nº 89 (hospital de sangre) y, a los 82 años, lo dirigió incluso durante la ofensiva de 1918, cuando se negó a evacuarlo a pesar del avance alemán. El Gobierno francés la condecoró con la Legión de Honor.
Mañana se cumplen 96 años de la muerte de Josefa en su Brunoy. Es la última que queda en la cripta de los Balcarce en el cementerio local. Ella se encargó del traslado de los restos del General a Buenos Aires en 1880, de preservar sus cartas y biblioteca (que cedió a Bartolomé Mitre).
Tiempo después los otros restos, de Mariano y Merceditas fueron trasladados a Mendoza. El Gobierno francés la considera una heroína francesa y no autorizó su traslado.
Argentino Lopez
El Petit Chateau, en una pintura de la época en la que pertenecía a la realeza francesa.