sábado, 17 de febrero de 2018

Un poco de historia: 17 de Febrero de 1913

Thomas Alva Edison presenta la primera prueba pública de cine sonoro
La idea de combinar imágenes en movimiento con sonido grabado es casi tan antigua como el propio concepto de cine. El 27 de febrero de 1888, pocos días después de que el pionero fotográfico Edward Muybridge diera una conferencia no muy lejos del laboratorio de Thomas Edison, los dos inventores se reunieron en privado. Muybridge más tarde afirmó que en esta ocasión, seis años antes de la primera exhibición de una película comercial, propuso un esquema para el cine sonoro que combinaría su proyector de imágenes zoopraxiscopio con la tecnología de sonido grabado de Edison. No se llegó a ningún acuerdo, pero durante un año Edison se encargó del desarrollo del Quinetoscopio, esencialmente un sistema de «visionado rápido», como complemento visual para su cilindro fonográfico. Los dos aparatos fueron refundidos en el Quinetófono en 1895, pero el visionado individual de imágenes en movimiento en un armario pasó pronto de moda por los éxitos en la proyección de cine. En 1899 apareció un sistema de sonido de cine proyectado conocido como Cinemacrofonógrafo, o Fonorama, basado principalmente en el trabajo que el inventor suizo François Dussaud expuso en París; similar al Quinetófono, el sistema requería el uso individual de auriculares. Un sistema mejorado basado en el cilíndro, Phono-Cinéma-Théâtre, fue desarrollado por Clément-Maurice Gratioulet y Henri Lioret de Francia, permitiendo presentarse cortometrajes de extractos de teatro, ópera y ballet en la Exposición de París de 1900. Estas parecen ser las primeras películas exhibidas públicamente con la proyección tanto de imagen como de sonido grabado.
Sin embargo, tres importantes problemas persistían llevando a las imágenes en movimiento y al sonido grabado a tomar caminos separados durante una generación:
Sincronización – Las imágenes y el sonido se grababan y reproducían por aparatos separados, que eran difíciles de comenzar y mantener en sincronización. Aunque los proyectores de imágenes en movimiento pronto permitieron que el cine se mostrara a audiencias más grandes de teatro, la tecnología de audio, antes del desarrollo de la amplificación eléctrica, no podía sobresalir para llenar satisfactoriamente grandes espacios.
Fidelidad de la grabación – Los sistemas primitivos de la era producían sonido de muy baja calidad, a no ser que los intérpretes estuvieran colocados directamente en frente de los voluminosos aparatos de grabación (altavoces de trompeta, por lo general), imponiendo serios límites en el tipo de películas que podían crearse con sonido grabado en directo.