DIFUSIÓN
Festival Palabra en el Mundo
Coordinación Sur
Camaradas del canto en junco y capulí
Les envío esta valoración. Digamos que la estoy diciendo en voz alta.
Hacia adelante no sabemos que puede acontecer, esto no nos impide decir
que pondremos nuestra seguridad para volver a San José de Ocoa en otra vuelta
del mundo alrededor del sol.
Valoración del Festival Literario Sur
En tiempos de los taínos toda la isla estaba dividida en cinco
cacicazgos, eso me dijeron y creí entender: Marién, Maguana, Higüey,
Xaragua y Maguá. Salvo Maguana, creo no conocer los otros lugares.
Ahora dos países comparten la isla, En este 2023, inicios del tercer
milenio, fuimos a San José de Ocoa, se me ocurre que los avezados buscadores de
oro, para hacerse ricos por el camino más corto, con sus atrabiliarias
actitudes en poco tiempo lograron el despreciable no mérito de que murieron
todos los taínos. Como valoración de ellos quiero decir que Caonabo, el jefe de
Maguana, al enterarse de la llegada de los aventureros y sus desmanes, viajó a
lo que hoy es conocido como Puerto Plata, el detalle que no explican los
historiadores es ¿cómo lo hizo y en cuánto tiempo? Tienen mi admiración por las
proezas que vencieron en ese viaje.
Me corresponde hablar de un viaje, de apenas una hora y unos cuarenta y
cinco minutos. Desde Santo Domingo a eso de las cinco treinta o cuarenta,
pasamos a buscar a la compañera Carmen Ariza, comenzamos a hacer carretera con
noche, al anunciarse la madrugada ya estábamos cerca. En teoría debíamos estar
en un evento a las 8 y 30, no registré la hora de nuestra llegada, al momento
de entrar al recinto, donde transcurrieron la mayoría de los eventos, ya había
cuatro compañeros, ninguno de ellos era parte del comité organizador, no era
buena señal, para peor nos enviaron a desayunarnos y solo había café y algo que
pudiéramos calificar de chocolate, pero no era. Otro desencuentro.
Luego se disiparon los malos augurios, comenzaríamos con dos horas de
retraso, a partir de ahí se impuso la amabilidad de todos, participantes,
voluntarias (os) y organizadoras (es). Con el compañero José Miguel Gonzales
Rossi nos tocó participar en un taller sobre la importancia de la lectura en
una escuela de artes, Raquel Catalán, María Estel Camacho y Carmen Ariza,
fueron a otra escuela. Aparte de lo anecdótico podemos decir que esos
encuentros con jóvenes y niños, fue un acierto, un aporte, para nosotros que
siempre aprendemos de lo bueno y de lo no bueno y su intermedio, también lo fue
para los que allí cumplieron la misión de atender nuestras palabras. Lo
importante es haber estado allí, mejor si nuestro intento de comunicación fue
un éxito, esto no lo podemos saber hasta pasados algunos años.
En la tarde nos llevaron a conocer algo de lo que ya para nosotros era
un agradable descubrimiento, la plaza (aquí dicen parque) es la mejor que
hayamos visto de todos los lugares visitados, atravesamos algunos montes, el
camino subía y bajaba hasta que llegamos a orillas de un río, allí descansamos
unos minutos saboreando una Presidente (cerveza pilsener dominicana), gentileza
del comité organizador, luego nos alejamos, se improvisó una lectura de poesía
y relatos. Fue un encuentro alegre con algunas creaciones del talento allí
reunido.
Para hacer corta mi valoración diré que en todo evento hay momentos
olvidables y otros que son un aporte a tu peregrinar por el saber. Al día
siguiente asistimos a conferencias, organizadas por temas en grupos de tres, todas
de muy buen nivel. Los organizadores lograron un eco tremendo, allí se
congregó, no sé si lo mejor, pero sí varios eran reconocidos y laureados
intelectuales. Lo cual me permite aventurar que allí, en una ciudad pequeña,
situada en la montaña, es decir un lugar alejado de los portentos del mundo
moderno, se reunió o respondió al llamado de la región sur de República
Dominicana, lo más granado de la literatura y el pensamiento crítico del país.
En suma, mi pensar positivo es que este encuentro literario no fue para exaltar
egos, fue para conocernos en nuestros deberes, para disipar angustias y asumir
la tarea de pensar el país que queremos, esto último está resumido en un
llamado, esbozado allí, que se dará a todas y todos las y los que algo tienen
que ver con la literatura y el arte, para que la declaración sea el resultado
del pensamiento colectivo, lo cual la hará mucho más representativa y efectiva.
Para terminar, valoro el que hayan realizado tremendo trabajo, valoramos
que los resultados nos den impulso, valoramos que hayan valorado a quienes
hacen su aporte, casi todas y todos desde las dificultades, valoramos a quienes
participaron, valoramos que se esté reconociendo la constancia por el
desarrollo del pensamiento y el arte de la región sur, valoramos que al
proponerles sean arte y parte del movimiento Sur, no le hayan hecho asco a la
propuesta, valoramos en toque personal, la compañera Fanny nos invitó a su casa
de campo a compartir un té y unas galletas, valoramos que sean, las personas
que conocimos, trabajadoras, honestas, amables, sonrientes, de ustedes hemos
aprendido: somos hermanas, hermanos en la lucha por cambios tendientes al
desarrollo del potencial creador del ser humano, ustedes lo han demostrado, es
posible.
Si así estamos haciendo un aporte, unidos podemos hacer mucho, pero
mucho más.
Tito Alvarado