CULTURA
Reseña histórica del carnaval
El carnaval comenzó a celebrarse a partir del 1600, mezcla de legado español y el candombe bailado por los esclavos negros.
Los bailes de carnaval se comenzaron a realizar en locales cerrados a partir del año 1771.
Al principio eran organizados en casas particulares y luego se trasladaron a los clubes barriales.
En épocada del Brigadier Rosas tuvo importante auge: Vicente Fidel López da cuenta de la celebración del 25 de mayo de 1836 en Plaza de la Victoria (que actualmente forma parte de la Plaza de Mayo) con la participación de 6000 negros dando lugar a una reunión de indescriptible colorido y desbordante entusiasmo.
A las fiestas de candombe concurrían la hija de Juan Manuel de Rosas: Manuelita Rosas, y la madre de ésta y esposa de Juan Manuel, doña Encarnación Ezcurra y el propio gobernador Rosas. (1)
En 1858 aparece la primera comparsa, en 1867 el viajeron gascón Henry Armaignac es uno de los testigos que consideraron que los carnavales argentinos eran en su época los más festivos del mundo recordando que las mujeres arrojaban huevos rellenos con agua a los hombres y se usaban pomos de plomo para mojar con agua muchas veces perfumada, en 1869 se realiza el primer corso, con la participación de máscaras y comparsas. Al año siguiente, se incorporan carruajes (carrozas) y luego ya afines de siglo XIX surgen la murga generalmente integrando parte del corso.
Entre finales del siglo XIX y las primeras décadas de 1900, los corsos alcanzaron su máxima popularidad, pero a partir de 1915 las comparsas comenzaron a desaparecer, y surgen las murgas, con características diferenciadas en el tipo de música y formas de manifestación, siendo más grotescas y picarescas.
En Argentina han existido disfraces tradicionales: el payaso, el "indio", el "oso Carolina", los "esqueletos" etc. Los murgueros suelen danzar con un traje que caricarituriza a los antiguos trajes de etiqueta (por ejemplo, fracs) con "galeras" (chisteras) enormes y de abigarrados y alegres colores. Entre las clases altas y medias hasta los 1960 eran comunes las mascaradas de tipo veneciano con antifaces plateados o dorados y disfraces tradicionales como el de Colombina y Arlequín.
Hasta fines de los 1960 los carnavales en Argentina eran sexualmente recatados aunque muy divertidos (no existían prácticamente hechos de violencia) y, en la Ciudad de Buenos Aires eran célebres los corsos (desfiles de carnaval) con lujosas carrozas recorriendo la Avenida de Mayo o las principales avenidas del barrio de Flores bajo lluvias de papel picado de muchos colores, confetti y serpentinas al son de pitos (silbatos), cornetas y matracas; con estos carnavales porteños competían los corsos de la Ciudad de Córdoba que tenían por epicentro al Parque Sarmiento, estos carnavales tenían principalmente influjos europeos y, de tales influjos europeos, principalmente influjos españoles e italianos. (2)
Biografía consultada
1)- El Candombe. ISBN 950-9413-64-X.
2)- Wikipedia
https://es.wikipedia.org/wiki/Carnaval_en_Argentina
La Avenida de Mayo engalanada para los carnavales de 1922.