El Arquitecto Oscar Jorge Farías, oriundo de
la ciudad de Isidro Casanova, provincia de Buenos Aires, sigue generando
conciencia en viviendas dignas para los ciudadanos de la Patria Grande, con
urbanización económica, que mejora la calidad de vida de los habitantes, he
aquí algunas notas periodísticas.
Construyen
iglú como opción de una vivienda económica
El iglú, una construcción característica en zonas
de mucho frío se adapta a zonas tropicales, donde el ladrillo cocido de tierra
de barro, reemplaza a los grandes bloques de hielo. Esta es una propuesta que
se encuentra construyendo la Red de Viviendas Saludables Paraguay, en
Encarnación, Departamento de Itapúa. Por Raúl Córtese
ENCARNACIÓN
Es una
construcción que en solo 15 días llega a término y tiene una inversión de
250.000 guaraníes por metro cuadrado.
La obra se
realiza en el barrio Mbói Ka'e de Encarnación y se encuentra a la vista de los
interesados que quieran visitarla.
Oscar Jorge
Farías, arquitecto que lleva adelante esta construcción, explicó que este tipo
de viviendas ya fueron construidas 6 años atrás en la localidad de Caacupé y en
Itacurubí de la Cordillera, además de otra construcción que se llevará adelante
en la localidad de Villarrica, Departamento de Guairá, en la semana próxima.
"Es una
construcción fácil y económica. Hay que tener en cuenta que estas
construcciones por su forma fueron hechas en zonas con vientos huracanados y
temperaturas extremas. Con un buen revoque y pintura exterior clara, se reduce
de manera considerable el calor dentro de la misma", detalló el
profesional responsable de la nueva construcción.
Agregó que se
trata de techo y pared al mismo tiempo, por lo cual allí ya se produce un
ahorro considerable. "El impacto de los rayos solares es muy diferente
sobre este techo esférico que sobre un techo de una vivienda convencional",
agregó sobre la iniciativa que se realiza en la ciudad de Encarnación.
Para el
responsable, ante el clima cambiante que soporta la región, es una casa que no
va a tener problemas con vientos ni con las lluvias, además de lo económico de
su construcción, ya que para su asentamiento necesita cimientos escasos.
"En la
parte superior existe una claraboya, por lo que prácticamente no se necesita
luz artificial debido a la luz que ingresa por ese lugar. Este tipo de
construcciones se pueden llevar a dimensiones más importantes o construir
inclusive toda una vivienda con diferentes habitaciones, distribuidas como en
las casas que todos tenemos", significó el arquitecto.
El profesional
insistió que esta propuesta es nueva y aún falta mayor difusión, "la
economía ante el cambio climático es una muy buena opción, no es difícil de
construir y no se necesita de mano de obra especializada", manifestó e
invitó a la gente a visitar la construcción.
Viviendas sustentables para
mejorar la calidad de vida
El Arquitecto
Oscar Jorge Farías, pertenece a la Red de Viviendas Saludables del Paraguay y a
la Asociación UNESCO de Corrientes, en una entrevista con la radio
comunitaria “Candela” comentó que dentro del marco del proyecto
Cultura y Desarrollo Sustentable se han especializado en el trabajo en áreas
rurales, pueblos, pequeñas ciudades y desarrollo local para la construcción de
viviendas sustentables.
“Las
tecnologías apropiadas cumplen la función de mejorar la calidad de vida y
lograr un mejor bienestar” afirmó. También trabajan con sectores sociales del
área rural, campesinos, sectores periféricos urbanos, escuelas rurales, centros
comunitarios, donde utilizan los materiales del lugar, técnicas con ladrillos
cerámicos.
Problemas de la
vivienda
El manejo del
fuego, donde generalmente la mujer cocina sobre una mesada. Manejo del agua
potable, las viviendas no cuentan con tanque de almacenamiento para la huerta o
para animales domésticos. El manejo de las excretas, materia fecal y orina.
El manejo de los
residuos
Durante el
encuentro Latinoamericano de Estudiantes de Arquitectura (LEA) que se realizó
con la participación de más de 100 estudiantes en Encarnación, el Arq. Farías
llegó para conocer algunas áreas donde realizaría su trabajo. Es así como llegó
hasta el Centro Crecer con Futuro- Ara Pyahu del Barrio San Antonio Ypekuru de
la ciudad, donde actualmente están construyendo un horno que facilitará la
cocción de los alimentos e inclusive el manejo del tiempo y participación de
las mujeres, según explicó.
Afirman que se puede hacer una casa por 30 mil pesos
27/12/2010 09:00
Como estaba previsto, a tres meses de su inicio, la cooperativa Coopteba estará
finalizando en estas horas el proyecto piloto de construcción de viviendas que
podría convertirse en una solución para centenares de familias de la comarca,
dado que permite construir una casa con 30 mil pesos.
CARMEN DE
PATAGONES (A) -- Como estaba previsto, a tres meses de su inicio, la
cooperativa Coopteba estará finalizando en estas horas el proyecto piloto de
construcción de viviendas que podría convertirse en una solución para
centenares de familias de la comarca, dado que permite construir una casa con
30 mil pesos.
Se trata de una
vivienda tipo iglú de 50 metros cuadrados de superficie que se construye en el
corazón del barrio Patagonia de esta ciudad, más precisamente en la calle Luis
Vernet, entre Domingo de Oro y doctor René Favaloro.
Desde sus
inicios se sabía que el éxito de esta iniciativa dependería de dos factores:
los costos de construcción y la adaptación de la estructura a las condiciones
climáticas de la Patagonia Norte.
Tomando en
cuenta los resultados preliminares --según señaló a este medio la flamante
presidenta de Coopteba, Magdalena Albanese-- en principio se estaría cumpliendo
el objetivo de construir una casa accesible y con buenas condiciones de
confort.
"Se están
terminando de cerrar los números, porque todavía no terminamos de pagar la mano
de obra ni los materiales. La idea es evaluar básicamente el costo de los
materiales, porque es una propuesta que tiene posibilidad de autoconstrucción,
por eso lo que más interesa es el costo real de los materiales", explicó
la titular de la cooperativa.
Por lo que se
tiene calculado, el costo de los materiales rondará --como estaba previsto--
los 15 mil pesos, mientras que la mano de obra tendría números similares.
Experiencias
idénticas en Bahía Blanca, que han arrojado que el costo de los materiales
necesarios para levantar estas casas-iglú, ronda los 15 mil pesos, sumado al
costo de la mano de obra en valores similares, da que las casas-iglú, no
tendrían un costo superior a los 30 mil pesos.
Esto representa
alrededor del 60 por ciento de lo que cuestan las viviendas del Plan Federal,
las cuales tienen menos de 50 metros cuadrados.
"El
objetivo experimental tiene que ver con la posibilidad de autoconstrucción y
eso lleva a ser una vivienda verdaderamente económica. Teniendo en cuenta los
valores que uno puede comparar con el costo de una construcción tradicional,
estamos hablando de un tercio de lo que vale", enfatizó.
De confirmarse
las presunciones sobre los costos, la cooperativa Coopteba podría lanzarse a
replicarlo en centenares de predios.
Respecto de la
finalización, Albanese indicó que asumieron tener la obra en tres meses y
calculan que esta semana, o a más tardar los primeros días de la otra, estará
lista.
Aclaró que luego
sólo restará la conexión a las redes externas, pero el resto estará todo listo
como para ser habitada.
Alternativa
Este proyecto
nació en el marco de los principios de la cooperativa maragata, que es buscar
alternativas de viviendas dignas, lo más económicas posibles, para que accedan
a ellas la mayor cantidad de trabajadores.
Con esta
iniciativa, que es experimental, los integrantes de Coopteba Patagones intentan
analizar una alternativa habitacional que conjugaría economía y calidad, y que
creen que podría ser replicada en la comarca.
En la búsqueda
de proyectos habitacionales económicos, tiempo atrás Coopteba se vinculó con
responsables de la iniciativa Viviendas Social Iglú, de Bahía Blanca, y con el
arquitecto Oscar Farías, quien trajo la iniciativa a la región. Además, tomaron
contacto con técnicos del INTA Hilario Ascasubi, quienes, en algún momento,
brindaron capacitación para ejecutar este tipo de viviendas.
Cabe recordar
que el proyecto, si bien es novedoso porque es habitacional integral, no es
absolutamente nuevo en el distrito de Patagones. De hecho, hay una casa-iglú en
un campo cercano a Juan A. Pradere, construida por el arquitecto Oscar Farías;
otra dentro de la localidad; y otras cinco en Bahía San Blas, una de ellas de
reciente ejecución.
90
días de trabajo
Del inicio de la
experiencia piloto en Patagones participaron integrantes de distintas
organizaciones de la zona vinculadas a la ejecución de viviendas sociales, así
como constructores particulares.
Se estimaron
unos 90 días de construcción (los cuales se están cumpliendo), para luego
iniciar la evaluación de la iniciativa.
El proyecto
presentado al municipio de Patagones fue declarado de interés municipal. Si la
experiencia es exitosa, no se descarta solicitar apoyo formal de las
autoridades para poder llevar adelante nuevos emprendimientos de casas-iglú.
"Esta idea
no sólo apunta a generar alternativas para que mucha gente acceda a su
vivienda, sino fortalecer los espacios de investigación sobre la ejecución de
casas económicas, de calidad y escasa complejidad", recalcó Nicolás
García, presidente de Coopteba en el inicio del proyecto.
Una
fila por día
El iglú, por su
conformación, tiene tiempos muy particulares de construcción, ya que sólo se
puede levantar una fila de ladrillos por día del perímetro. El diámetro de este
tipo de casas tiene 8 metros, dentro de los cuales se ubican dos piezas,
cocina-comedor y baño.
Vivienda Iglú
Entrevista al Arq. Jorge Farías
sobre la construcción de la Mediateca y Semilloteca Comunitaria de El Cántaro
Bio-Escuela Popular con beneficios económicos y ecológicos.