El
28 de noviembre de 1822 fallece en Morón en la provincia de Buenos Aires, el Poeta Gauchesco Rioplatense Bartolomé Hidalgo, elogiado por Mitre y Borges. Nació en
Montevideo en la República
Oriental del Uruguay el 24 de agosto de 1788.
Cielito
de la independencia
Si de todo lo criado
es el cielo lo mejor,
el "cielo" ha de ser el baile
de los Pueblos de la Unión.
Cielo, cielito y más cielo,
cielito siempre cantad
que la alegría es del cielo,
del cielo es la libertad.
Hoy una Nación
en el mundo se presenta,
pues las Provincias Unidas
proclaman su Independencia.
Cielito, cielo festivo,
cielo de la libertad,
jurando la Independencia
no somos esclavos ya.
Los del Río de la Plata
cantan con aclamación,
su libertad recobrada
a esfuerzos de su valor.
Cielo, cielito, cantemos,
cielo de la amada Patria,
que con sus hijos celebra
su libertad suspirada.
Los constantes argentinos
juran hoy con heroísmo,
eterna guerra al tirano,
guerra eterna al despotismo.
Cielo, cielito, cantemos
se acabarán nuestras penas,
porque ya hemos arrojado
los grillos y las cadenas.
Jurando la Independencia
tenemos obligación,
de ser buenos ciudadanos
y consolidar la Unión.
Cielo, cielito, cantemos,
cielito de la unidad,
unidos seremos libres,
sin unión no hay libertad.
Todo fiel americano
hace a la Patria traición,
si fomenta la discordia
y no propende a la Unión.
Cielo, cielito, cantemos
que en el cielo está la paz,
y el que la busque en discordia
jamás la podrá encontrar.
Oprobio eterno al que tenga
la depravada intención
de que la Patria se vea
esclava de otra nación.
Cielito, cielo festivo,
cielito del entusiasmo,
queremos antes morir
que volver a ser esclavos.
¡Viva la Patria, patriotas!
¡Viva la Patria y la Unión,
viva nuestra independencia,
viva la nueva Nación!
Cielito, cielo dichoso,
cielo del americano,
que el cielo hermoso del Sud
es cielo más estrellado.
El cielito de la Patria
hemos de cantar, paisanos,
porque cantando el cielito
se inflama nuestro entusiasmo.
Cielito, cielo y más cielo,
cielito del corazón,
que el cielo nos da la paz,
y el cielo nos da la Unión.
Si de todo lo criado
es el cielo lo mejor,
el "cielo" ha de ser el baile
de los Pueblos de la Unión.
Cielo, cielito y más cielo,
cielito siempre cantad
que la alegría es del cielo,
del cielo es la libertad.
Hoy una Nación
en el mundo se presenta,
pues las Provincias Unidas
proclaman su Independencia.
Cielito, cielo festivo,
cielo de la libertad,
jurando la Independencia
no somos esclavos ya.
Los del Río de la Plata
cantan con aclamación,
su libertad recobrada
a esfuerzos de su valor.
Cielo, cielito, cantemos,
cielo de la amada Patria,
que con sus hijos celebra
su libertad suspirada.
Los constantes argentinos
juran hoy con heroísmo,
eterna guerra al tirano,
guerra eterna al despotismo.
Cielo, cielito, cantemos
se acabarán nuestras penas,
porque ya hemos arrojado
los grillos y las cadenas.
Jurando la Independencia
tenemos obligación,
de ser buenos ciudadanos
y consolidar la Unión.
Cielo, cielito, cantemos,
cielito de la unidad,
unidos seremos libres,
sin unión no hay libertad.
Todo fiel americano
hace a la Patria traición,
si fomenta la discordia
y no propende a la Unión.
Cielo, cielito, cantemos
que en el cielo está la paz,
y el que la busque en discordia
jamás la podrá encontrar.
Oprobio eterno al que tenga
la depravada intención
de que la Patria se vea
esclava de otra nación.
Cielito, cielo festivo,
cielito del entusiasmo,
queremos antes morir
que volver a ser esclavos.
¡Viva la Patria, patriotas!
¡Viva la Patria y la Unión,
viva nuestra independencia,
viva la nueva Nación!
Cielito, cielo dichoso,
cielo del americano,
que el cielo hermoso del Sud
es cielo más estrellado.
El cielito de la Patria
hemos de cantar, paisanos,
porque cantando el cielito
se inflama nuestro entusiasmo.
Cielito, cielo y más cielo,
cielito del corazón,
que el cielo nos da la paz,
y el cielo nos da la Unión.