CULTURA
El Gran Museo Egipcio abre al mundo su colosal colección faraónica tras
dos décadas de espera
Primeros ministros, presidentes y miembros de
la realeza asistieron este sábado 1 de noviembre a la inauguración del extenso
y colosal museo construido cerca de las Pirámides de Egipto y que albergará una
de las colecciones de antigüedades más ricas del mundo.
"Los hemos invitado a venir a esta tierra
de paz y amor, y disfrutar de esta celebración para hacer de este museo una
para plataforma del diálogo, un destino para el conocimiento y un puerto para
la humanidad. También que sea un faro para los amantes de la vida que creen en
la humanidad", sostuvo este sábado el presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi.
La inauguración del Gran Museo Egipcio (GEM) marca el final de dos décadas de esfuerzos de
construcción obstaculizados por las revueltas de la Primavera Árabe, la
pandemia y las guerras en la región.
"Todos hemos soñado con este proyecto y
con que realmente se hiciera realidad", afirmó el primer ministro, Mostafa
Madbouly.
En una conferencia de prensa, el primer
ministro describió el museo como un "regalo de Egipto al mundo entero, de un país
cuya historia se remonta a más de 7.000 años".
El sábado, numerosos espectadores, entre ellos
el presidente Abdel Fattah al-Sisi, se congregaron frente a una enorme pantalla
situada en el exterior del museo, que proyectaba imágenes de los lugares
culturales más famosos del país mientras bailarines con brillantes atuendos de
estilo faraónico ondeaban orbes y cetros luminosos
Un "nuevo capítulo" de la historia
La
primera parte de la ceremonia se centró en recordar la universalidad del
Antiguo Egipto y la cooperación internacional y conectó en primer lugar con una
orquesta en Japón -país que financió la construcción del GEM -, para luego
pasar por París, Río de Janeiro y Nueva York.
La ceremonia fue
amenizada por estrellas del pop egipcias y una orquesta internacional vestida
de blanco bajo un cielo iluminado por láseres, fuegos artificiales y luces
flotantes que formaban jeroglíficos en movimiento.
Con
la apertura del museo, Egipto estaba "escribiendo un nuevo capítulo en la
historia del presente y el futuro de esta antigua nación", dijo Sisi en la
inauguración.
Entre los
asistentes se encontraban el presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, el
primer ministro holandés, Dick Schoof, el primer ministro húngaro, Viktor
Orban, el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, el presidente de
la República Democrática del Congo, Felix Tshisekedi, y los príncipes herederos
de Omán y Bahrein.
Explorando los tesoros de Tutankamón
La
atracción más promocionada del museo es la extensa colección de tesoros de la
tumba de Tutankamón, descubierta en 1922, que incluye la máscara funeraria
dorada del niño rey, el trono y el sarcófago y miles de otros objetos.
Una colosal
estatua de Ramsés II que durante décadas estuvo ubicada en una plaza del centro
de El Cairo que lleva el nombre del faraón ahora adorna el gran vestíbulo de
entrada.
El elegante diseño del complejo, que evoca las
Pirámides, contrasta marcadamente con las exhibiciones polvorientas del Museo
Egipcio neoclásico, que abrió sus puertas hace más de un siglo en el centro de
El Cairo, con vistas a la plaza Tahrir.
Antiguo museo saqueado
El
antiguo museo sufrió vejaciones en los últimos años, incluido
el saqueo de varias vitrinas durante el levantamiento egipcio de
2011, cuando el robo de antigüedades era generalizado.
En 2014, la
barba de la máscara funeraria de Tutankamón se desprendió cuando los
operarios cambiaban las luces de la vitrina, y luego fue pegada de forma
chapucera. Al año siguiente, la máscara fue restaurada correctamente y volvió a
exhibirse.
Las
autoridades esperan que el nuevo museo pueda acabar con la percepción,
alimentada por estos acontecimientos, de que Egipto ha sido negligente en el
cuidado de sus tesoros invaluables, y reforzar sus reivindicaciones para que se
devuelvan los objetos egipcios que se encuentran en museos del extranjero.
"¿Es un
santuario nacional o un escaparate mundial? ¿Un gesto de soberanía cultural o
una herramienta de poder blando?", se leía en un artículo de una edición
especial del semanario estatal Al-Ahram dedicada al museo, al que calificaba de
"una filosofía tanto como un edificio".
"El GEM no es una réplica del Louvre ni
del Museo Británico. Es la respuesta de Egipto a ambos. Aquellos museos
nacieron del imperio; este nace de la autenticidad."
El museo, cuyo coste superó los mil millones de dólares, fue
financiado en gran parte con préstamos japoneses para el desarrollo. Diseñado por
el estudio irlandés Heneghan Peng Architects, ocupa unas 120 hectáreas, lo que
lo hace aproximadamente del mismo tamaño que la Ciudad del Vaticano.
Los
funcionarios también apuestan por que el museo, el último de una
serie de megaproyectos lanzados o completados desde 2014, puede acelerar un
resurgimiento del turismo, una fuente vital de divisas para una economía
golpeada por años de conflictos regionales e incertidumbre económica.
Una serie de galerías se habían
inaugurado a finales del año pasado, pero muchas de las exposiciones no
eran accesibles al público.
Fuente consultada
France24.com
https://www.france24.com/es/cultura/20251101-el-gran-museo-egipcio-abre-al-mundo-su-colosal-colecci%C3%B3n-fara%C3%B3nica-tras-dos-d%C3%A9cadas-de-espera?utm_medium=acquisition&utm_source=facebook&utm_campaign=france24_es&utm_content=clic&fbclid=IwY2xjawN4QcxleHRuA2FlbQEwAGFkaWQAAAZAHUWNcGJyaWQRMXZxR3FzekUyM1FXbDlhRU1zcnRjBmFwcF9pZBAyMjIwMzkxNzg4MjAwODkyAAEeFqekYKb1uIMG_ugHb6NaIxOTih-HYgqlaP7tY-gD4bzQFaQ24n3BvZ49ffg_aem_vUlwo0e2Un4JvP8MoO77oQ